Los Gigantes que nos amenazan
Qué difícil es enfrentarse ante un diagnostico medico, aceptar una separación, dejar ir a nuestros seres queridos, enfrentar problemas financieros, laborales o personales. Ciertamente afrontar nuestros problemas cualquiera que sea, se nos hace humanamente difícil y agotador, mas aun cuando ellos se nos presentan de una manera atemorizante, amenazante, susurrándonos de manera irónica que ya estamos perdidos.
Quizás hemos escuchado más de una vez algo como: “Es imposible que sobreviva”, “tu no lo vas a lograr”, “lo vas a perder todo”, “eres muy débil para soportar esto”, todo esto hace que nuestras inseguridades crezcan aun mas.
Y es que nos sentimos atemorizados al enfrentarnos ante un problema que para nosotros es muy grande, tan fuerte que nos hace sentir minúsculo a su lado, ¿Pero es que acaso Dios nos deja solos en algún momento?. Recordemos el enfrentamiento entre David y Goliat, 1 Samuel:17, Goliat era el mejor soldado del ejército de los filisteos con gran tamaño (casi 3 metros de altura) y con una actitud bastantes atemorizante, hacía sentir a cualquier soldado israelita incapaz de vencerlo, y ¿quien pudo hacerle frente? Un humilde, pequeño y delgado pastor, quien no se dejo amedrentar por la apariencia de este, y con fe y valentía le hizo frente hasta derrotarlo.
Como humanos no podemos evitar sentir en primera instancia temor, inseguridad, vergüenza, o cualquier otra cosa ante alguna adversidad, pero con nuestra confianza puesta en Dios si podemos evitar que esos sentimientos nos abrumen y nos impidan llegar hasta la meta.
Por eso no temas que Dios no deja que batalles solo, El es quien te da la victoria, así que ante la circunstancias, no importa que tan difíciles sea, ni la opinión que te den los demás, tu vas de la mano del señor, solo tienes que tener fe y permanecer fiel, no te dejes atemorizar, enfrenta tus problemas y temores y diles: ¡Tu llegues a mi cual gigante Goliat, vienes a mí con humillaciones y ofensas, estas armado cual guerrero listo para batallar, pero yo voy a ti de la mano de Jehová de los Ejércitos El me dará la victoria, y a Él sea la gloria!.
Bendito el varón que confía en Jehová, y cuya confianza es Jehová. 8 Porque será como el árbol plantado junto a las aguas, que junto a la corriente echará sus raíces, y no verá cuando viene el calor, sino que su hoja estará verde; y en el año de sequía no se fatigará, ni dejará de dar fruto. Jeremías 17:7-8.